El pasto, que incluye silo de pasto, heno y cultivos forrajeros, es una fuente natural de alimento para las vacas. Gracias a su entorno único, Nueva Zelanda es el lugar ideal para el cultivo de pasto de alta calidad.
Nuestras vacas consumen el 96% de su dieta a base de pasto y pasan más de 350 días al año en los pastizales, una práctica que no tiene comparación en ningún otro lugar del mundo.
Toda la alimentación cultivada en Nueva Zelanda para nuestras vacas proviene de plantas no modificadas genéticamente, ya que el país cuenta con leyes estrictas que prohíben la reproducción y el cultivo de plantas genéticamente modificadas.
Nuestro estándar de alimentación con pasto y pastura de Fonterra está certificado y auditado anualmente por AsureQuality, un organismo de evaluación de conformidad (CAB) independiente.
*El Estándar de Pastoreo y Alimentación con Pasto de Fonterra en Nueva Zelanda exige que nuestras vacas sean alimentadas al menos en un 80% con pasto (en base a peso seco) y que pasen al menos el 90% del tiempo fuera de la ordeña pastando al aire libre. Las vacas de Nueva Zelanda son alimentadas en un 96% con pasto (en base a lo consumido, en un promedio de tres años consecutivos, lo que equivale al 89% en base a peso seco) y pasan el 97% de su tiempo fuera de la ordeña al aire libre.